<meta name='google-adsense-platform-account' content='ca-host-pub-1556223355139109'/> <meta name='google-adsense-platform-domain' content='blogspot.com'/> <!-- --><style type="text/css">@import url(https://www.blogger.com/static/v1/v-css/navbar/3334278262-classic.css); div.b-mobile {display:none;} </style> </head> <body><script type="text/javascript"> function setAttributeOnload(object, attribute, val) { if(window.addEventListener) { window.addEventListener('load', function(){ object[attribute] = val; }, false); } else { window.attachEvent('onload', function(){ object[attribute] = val; }); } } </script> <div id="navbar-iframe-container"></div> <script type="text/javascript" src="https://apis.google.com/js/platform.js"></script> <script type="text/javascript"> gapi.load("gapi.iframes:gapi.iframes.style.bubble", function() { if (gapi.iframes && gapi.iframes.getContext) { gapi.iframes.getContext().openChild({ url: 'https://www.blogger.com/navbar.g?targetBlogID\x3d6630089935095889391\x26blogName\x3dHimenie+FanFic\x26publishMode\x3dPUBLISH_MODE_BLOGSPOT\x26navbarType\x3dSILVER\x26layoutType\x3dCLASSIC\x26searchRoot\x3dhttps://himenie-fanfic.blogspot.com/search\x26blogLocale\x3des\x26v\x3d2\x26homepageUrl\x3dhttp://himenie-fanfic.blogspot.com/\x26vt\x3d6840939001325592992', where: document.getElementById("navbar-iframe-container"), id: "navbar-iframe" }); } }); </script>


Why Empty? [Capitulo 3]
4 de julio de 2013 @ Why Empty? [Capitulo 3]

• Indice de '「Why / empty?」'


Capitulo 3: El primer problema (Vol. I)


— Ven, te quiero enseñar algo ... — Jaejoong extendió su mano para que Yunho se levantara también de la silla.

— ¿Qué es lo que pretendes? — le preguntó Yunho tomando su mano para que le impulsara de manera exagerada (no parecía que el joven Jaejoong tuviese fuerza, por lo que sorprendió a Yunho) y así ambos quedaron en pie tras haber terminado apresuradamente de comer.

— ¿Qué crees que es lo que pretendo? ... — le respondió con otra pregunta.
Yunho no sentía ningún miedo por aquel misterio, a pesar de aquella sensual pregunta.

Jaejoong se acercó al mostrador de aquel lamentable restaurante — ¡Neung Mi! ... Neung Mi — comenzó a gritar para que aquella mujer corpulenta apareciera de nuevo.

— ¿Qué son todos esos gritos? — preguntó la mujer alterada al salir de aquel pequeño escondite (que se trataba de la cocina).

Jaejoong sonrió a la vez en la que comentaba con voz tierna — Ya es hora de que marche. Todo estaba delicioso. Gracias — hizo una pequeña reverencia que Yunho copió.

La mujer miró a ambos un tiempo en silencio, dirigió la mirada a Jaejoong mientras le señalaba con su dedo de uña larga y femenina.

— Por favor, Jaejoong no te metas en más problemas, y ten cuidado, ¿de acuerdo? ... — le dijo la mujer oronda en modo de amenaza, tal y como una madre haría con su hijo. Por lo que Yunho entendió por que todos confundían aquella relación.

— Sí — contestó Jaejoong pesadamente, mientras se dirigía a la salida.


~~~~~~~


Una vez fuera, en las tranquilas calles, Yunho pensó en aquella mujer.
Parecía que Jaejoong era un chico difícil de controlar...

Ambos caminaban a la par, de modo tranquilo, por lo que se animó a preguntar:

— ¿Ella sabe que ... ? —
A penas pudo terminar su frase, pues Jaejoong le miró y le contestó directamente:

— No. Al menos hasta donde yo sé. Nunca me ha mencionado nada — contestó.

Ese diablo debía adivinar los pensamientos, o algo así pensó Yunho.

— Me has dicho que me vas a enseñar algo, pero aún no sé hacia donde estamos caminando — dijo sin temor y con más impaciencia por saber a donde se dirigían sus pasos, pues únicamente seguía a aquel chico de cabellos negros ...

— No está muy lejos, así que no tienes por que impacientarte — le dirigió una sonrisa, estaba completamente impresionado por lo paciente que era Yunho, pero sobre todo por lo sereno que se le veía, muy a pesar de su cara fuerte y piel curtida.

Mientras caminaban bajando por las calles, Yunho comenzó a hablar, pues el silencio no era una buena compañía:

— Al final … tu historia resulto inconclusa ... ¿Dónde está la persona que te metió en todo este problema y al que llamabas amigo? —

Jaejoong pareció pensar sobre ello a la vez en la que no paraba de caminar guiando a su acompañante:

— Sinceramente, no lo sé. Hace tiempo que no sé nada de él. La distancia es siempre así .... Yo decidí distanciarme, por lo que ignoro que fue de él —

Yunho sintió pena de que aquella amistad resultase un fracaso para una persona que recién se hospedaba en un nuevo lugar.

— Veo que tu entrevista acerca mí nunca termina. Tendré que empezar a buscar preguntas que hacerte a ti, Yunho ... — Jaejoong le observó desafiante mientras giraba una esquina que les llevó a una estrecha y sombría callejuela, bastante mísera, donde unos ojos les miraban a ambos mientras ellos ignoraban que eran observados.

— ¿Qué es esta calle? — preguntó sorprendido por aquel sitio al que había sido guiado.

Jaejoong respondió a la vez en la que se quedaba parado frente a una amplia puerta: — Aquí es donde vivo ... Creí que para una persona tan curiosa como tú saber algo así sería como una explosión de emoción, ¿no? —

— Es realmente interesante ... — Yunho dio un vistazo a aquel lugar. Al parecer se trataba de un pequeño edificio, y al entrar en él confirmó que se trataba de un grupo de casas tan pequeñas como una simple habitación. Justo en el pasillo (donde ahora se hallaban ambos chicos), se encontraba iluminado de forma tenue, unas puertas (unas junto a otras) hacían un largo pasillo.

Jaejoong sacó su pequeña llave: — Dije "Quiero enseñarte algo", y sabes las cosas que hablan de mí, tienes información que te he sincerado, vamos a mi casa, ¿y aún así la frase "Quiero enseñarte algo" no te asusta? — le preguntó.

Yunho negó con su cabeza — ¿Por qué debería asustarme? — respondió.
Cosa que sorprendió a Jaejoong. Yunho sin duda no era un chico normal.

Mientras ambos todavía seguían en el pasillo frente a la puerta de aquella habitación número 06 (que se trataba de la de Jaejoong) un hombre de espalda doblada, pelo canoso casi inexistente, y ojos pequeños, se acercó a ambos y con voz fuerte y repetitiva dijo:

— Oh ¡NO! ¡NO! ... ¡NO! — casi gritaba, hasta quedar frente a Jaejoong y Yunho
Éste último confuso al ver que aquel hombre que no conocía le miraba con odio

— ¿No te da vergüenza, joven? Deja a este muchacho y marchate ... — le gritó mirando directamente a los ojos de Yunho. Después desvió su mirada y la dirigió a Jaejoong: — Te dije que no volvieras a traer a nadie, todos se quejan y viven molestos y avergonzados por tu culpa. No quiero avisarte más. Este sitio es para gente decente, muchacho, ves aprendiendo eso —

Las mejillas de Jaejoong se hincharon a modo de enfado, intentando guardar en ellas un montón de cosas feas que seguramente quería responder y que por respeto tragó:

— Perdone, ¿Recibió alguna queja de los vecinos últimamente? Seguramente no sea así, ya que intento respetar completamente lo que me dijiste, no quiero perder este sitio — le dijo al hombre mayor y decrépito.

— Intentas respetarlo ... ¿y ahora? — señaló a Yunho.

— Es sólo un amigo ¿Acaso no puedo? —

— Estaré atento de que no causes más problemas ¿entendido? — le amenazó por ultimo antes de marcharse.

Incluso cuando Jaejoong abrió la puerta y entraron en aquel hogar, Yunho aún seguía sorprendido.


— ¡Él es un hombre horrible! — exclamó el pelinegro nada mas cerrar la puerta — Lo siento mucho. En realidad no me meto en tantos problemas ... — se justificó.

Yunho se empezó a reír suavemente con una sonrisa casi silenciosa.
Nadie decía que Jaejoong fuese un ángel, salvo aquellos que solo le miraban la cara.

— ¿Qué es lo que a pasado? ... —
Todavía no podía quitar de su mente como el hombre le increpo sin sentido.

— Yunho, no te preocupes — tenía el don de que sus palabras sonaran realmente hermosas cuando hablaba de modo amable, pero de pronto la voz se volvía oscura y afilada: — Ese hombre la tiene conmigo, es el casero, dueño, propietario … llámalo como quieras. Y desde que todos los vecinos de este lugar se quejaron de mí, más me odia. Preferí no añadir esto en la historia que te conté. Estas paredes .. — Jaejoong pasó una de sus manos por la pared cercana de color canela de su pequeño apartamento — no son como el papel, directamente es como si no existiesen. Al comienzo, mucha gente venia a casa, y no precisamente a hablar, como lo estoy haciendo contigo ...—

Sorprendido y apenado contestó: — Me siento un poco mal, ahora que se que ese hombre me a confundido con ese tipo de persona. Y no he venido hasta aquí con alguna de esas intenciones ... —

— ¿Estás seguro de que no tienes esas intenciones? —

Yunho negó con su dedo. Los comentarios de Jaejoong siempre eran irónicos, de mente perversa y desconfiada, pero no era algo que le molestara al hablar con él.

— Jaejoong ¿vives en este lugar? — le preguntó al echar un vistazo a su alrededor. Observó lo pequeña que era la habitación en la que vivía Jaejoong. No era sucia, pero tampoco estaba ordenada. Lo que mas impactaba de ella era lo pequeña que era en comparación con una casa modesta.

Aquel era un apartamento de una sola habitación, por lo que la cocina se encontraba en el mismo lugar que el comedor y el dormitorio, todo en un reducido espacio, la única habitación apartada y privada se traba del aseo, lo demás estaba en una única estancia, donde incluso para una sola persona se hacia minúsculo... pero no lucia demasiado horrible.

Jaejoong asintió: — Por supuesto. ¿Creías que vivía en una mansión? ¿En una casa particular? ¿Qué pensabas exactamente de mí? ¿Qué pensaste de mí la primera vez que me viste? — sus preguntas salieron rápidas de sus gruesos labios.

Pensó la respuesta antes de contestar sencillamente a la última pregunta: — La primera vez que te vi pensé que eras una persona solitaria ... —

— Pero no quiero serlo ... Irónicamente, no me gusta estar solo — Yunho le miró preocupado por su respuesta. Jaejoong señaló la cama a la vez que le decía: — Siéntate en la cama, no te preocupes, como ya has escuchado antes, hace tiempo que no follo en ella —

— Demasiado directo. — susurró Yunho. Realizó sus ordenes descansando sus piernas al sentarse sobre aquella cama tan baja que casi rozaba el suelo, diferente a la mesa, la cual estaba prácticamente en el suelo — ¿Dónde haces "ese" tipo de cosas? — le preguntó de pronto.

Jaejoong quien todavía seguía en pie sonrió contestando:

— No sabes nada ¿verdad? ... ¿Quieres que te lo diga para ir a hurtadillas y espiarme? — dijo a la vez en la que se dirigía al frigorífico pequeño y blanco, abriéndolo de par en par —¿Quieres beber alguna cosa? Me encanta tomar ... Cuando recibo dinero muchas veces lo primero que hago con el es comprar bebida, tras ello, también un paquete de cigarrillos, preservativos y finalmente, ahorrarlos para la renta y ... la comida — lo último lo dijo como si no fuese algo realmente importante.

— ¿Sabes cocinar? — preguntó Yunho, incapaz de terminar su extensa entrevista a un inexplicable chico.

— Claro, Neung Mi me enseña. Ella trabaja duramente en la tienda decomida. Una de las razones por las que no puedo trabajar en tal negocio es la falta de dinero en él. Ella pasa momentos malos, ¿cómo podría pagarme? Es imposible, en un negocio en el que casi no aparece gente ... — contestó cuando había sacado dos botellas de fría cerveza, lo que mostraba que bebía sin problema a pesar de su edad.

— Es triste, ella realiza una comida realmente deliciosa — apostilló Yunho cuando el pelinegro se aproximó y le ofreció una de aquellas botellas de vidrio — Gracias — dijo cuando la aceptó en su mano.

Jaejoong se sentó junto a él en la pequeña cama

— La gente no se acerca a mí con intenciones de hablar, ¿Por qué no quieres tener sexo conmigo? — le preguntó mirándole directamente a los ojos — Tienes pareja, una chica, o algo así ... — dio un trago a su botella, la cual a pesar de contener alcohol parecía completamente inocente en una boca tan rosada.

— No. —

Jaejoong se sorprendió por la respuesta: — Es extraño, te ves bien ... — le alagó sin apartar sus inmensos ojos de Yunho, quien se veía un chico atractivo y masculino. Jaejoong pasó su mano por su brazo cubierto, y pensó que debía de ser de ese color atezado como su amable rostro.

Sus dedos apretaron el brazo de Yunho a la vez en la que comentó: — ¿Eres fuerte? Diría que tú también te metes en problemas más de una vez — aseguró al sentir entre sus dedos un brazo duro, muy lejos de ser un brazo enclenque, aunque tampoco era un musculo exageradamente notable.

Ante la presión de sus dedos y su atrevida mano, Yunho se quejó: — Jaejoong ... —

Jaejoong se apartó un poco, decepcionado: — Puedes rebuscar entre mis cosas, y husmear mis cajones ... no encontraras nada de interés, ni nada raro. No realizo nada extraño en mis relaciones. Seguramente sobre mí te dirán que hago de todo por dinero — (y así se lo habían hecho saber sus amigos) — Pero mi mente tiene un limite, y soy una persona bastante sencilla. Poca gente busca más de mí ... Sólo tienen curiosidad, o una fogosidad de la que quieren desprenderse, y les da igual que sea de un modo ordinario. Es complicado de explicar ... —

¿Ordinario? Yunho pensó en aquel primer encuentro con Jaejoong:
— Cuando te vi en la calle ... tú estabas con dos chicos ¿recuerdas? —

Jaejoong intento hacer memoria:
— Sí. No me importa especialmente que fuesen dos ... Sigue siendo ordinario y común —

No entendía como podía hablar de ello con tanta naturalidad mientras daba un trago a su botella.

— ¿Tenías novia? — Yunho preguntó aquello y al parecer la pregunta despertó el recuerdo del más delgado:

— Oh, sí, sí ... Antes de todo esto, sí. Pero ella no llegó a ver esto de mi. Es penoso. Cuando la gente esparció este rumor de mi, y hacían mención de que yo había tenido relaciones con hombres, nunca ninguna chica se acercó a mí y me pidió las cosas que ellos me piden. Nunca. Yo he llegado a la conclusión de que algunos son más descarados e irrespetuosos. Las chicas siempre se muestran afables y vergonzosas, en su mayoría, incapaces de acercarse a mi y decirme que haga cosas por dinero. En cambio ellos, en su mayoría, lo necesitan. Necesitan manejar a alguien ... — explicó.

El moreno asintió, entendiendo su teoría, comprendiendo perfectamente por qué Jaejoong era incapaz de tener pareja en esos momentos.

Pero no podía quedarse de brazos cruzados y pensar que ese chico, de su casi misma edad, no tenía nada más que ese difícil presente— ¿Y tus sueños? —

— ¿Sueños? — Jaejoong parecía no entender esa palabra

— ¿No tienes? Te independizaste de tu casa ... seguramente fue por un sueño ... — dedujó Yunho aún sentado sobre la cama junto a su acompañante.

— Si alguna vez tuve un sueño ... ya no recuerdo de que se trata. ¿Tú tienes alguno? Quizás ... ¿acostarte conmigo? —

A pesar de la sucia pregunta, Yunho no pudo evitar sonreír:
— No es ese ... — afirmó seguro — Me gusta bastante bailar ... — confesó.

— ¿Enserio? —Jaejoong quedó asombrado — Baila ... — le pidió

— No voy a hacer eso ahora ... — por primera vez Yunho estaba muy avergonzado — Pero seguro tienes un sueño. Algo que se te de bien hacer ... —

Jaejoong se quedó pensando antes de contestar:
— Montarme encima de la gente. Es algo que se me da bastante bien. ¿No crees? —

Yunho se sintió entristecido por aquella respuesta:

— La gente te infravalora, Jaejoong — le dijo, su voz sonó dura en un cuerpo joven — Te han dicho tantas veces que solo sabes hacer eso, que crees lo que han dicho de ti ... — se levantó de la cama, aún con la cerveza en su mano.

Miró a Jaejoong a los ojos, esos iris negros e inmóviles parecían de un animal asustado:

— Tienes que ser como yo. ¿Qué chico no tiene un sueño?. Somos jóvenes. ¿Por qué dejas que la gente te encasille en algo? ¿Por qué dejas que los demás adsorban tu confianza? Da igual que un idiota te hiciese daño, pero fuiste incapaz de levantarte tras eso ..., y aun sigues tumbado. Sigues encerrado en ese aseo en el que lloraste. Pero tienes que salir ya de allá ... —

Jaejoong parecía por primera vez serio tras escuchar a Yunho. Todo su teatrode naturalidad y despreocupación por su situación se derrumbaba cuando esta nueva persona le hablaba como nadie antes le había hablado.

— Yunho, tú eres diferente ... — bajó su mirada, incapaz de volver a atrás, de deshacer lo que ahora se había convertido por culpa de los demás.

— No soy tan diferente a ti ... — afirmó Yunho dando un trago a la bebida.

— Gracias ... —



~~~~~~~


Ambos salieron de aquel pequeño domicilio.
Para Yunho fue interesante saber donde vivía aquel chico.

Cuando ambos salieron, todavía unos ojos los observaban a lo lejos...

— Yunho ... — se escuchó de pronto.

Yunho miró a su alrededor, y observó como sus dos amigos aparecían aproximándose a él.
El chico de voz chillona, y el de los ojos minúsculos.

— Chicos — exclamó Yunho, sorprendido de ver a sus compañeros, quienes se acercaban con una cara de enojo, parando frente a ambos — Jaejoong, estos son mis amigos y ... — comentó Yunho antes de ser interrumpido:

— No continúes ... — le advirtió su amigo de ojos inexistentes — ¿a caso estas loco? —

— ¿No te dijimos que no te acercaras a él?.... — comentó el de voz chillona

Jaejoong se mantenía distante e incomodo al saber que hablaban de él.

— ¿Qué hacías tanto tiempo en su casa? Te hemos visto entrar, aguardábamos a que salieras y no fueses tú, pero ... mírate, sales de esa casa con ese chico como si nada ... ¿Qué has hecho?— le preguntó con ojos aún mas rasgados por la cólera de ver a su amigo junto a Jaejoong. — ¡Qué asco! Mejor no nos lo cuentes ...— dijo con cara de repulsión — ¿Qué diablos te a pasado? —

Yunho negó con sus manos: — No sé que es lo que estáis pensando, pero ... Jaejoong y yo hemos estado hablando. Él es un chico realmente amable y ... — de nuevo fue incapaz de hablar, su amigo de voz chillona le interrumpió con voz furiosa:

— ¿Cuándo hablasteis? ¿Antes o después de metérsela a esta puta? —

Jaejoong pareció no moverse ante tal insulto, observaba aquella discusión como si él no estuviese involucrado en ella.

— ¿Qué estáis diciendo? — preguntó Yunho
Su voz sonó irritada y sus cejas se arquearon, por lo que daba pavor.

— ¿y tú? ¿Qué pasa contigo, Yunho? No queremos hablar con una persona así ¿Qué no entiendes? Ya te hablemos de él — dijo su amigo de ojos insignificantes.

— Es una persona horrible, y extraña — afirmó el de voz aguda.

— No es así ..., Jaejoong es una persona cálida, muy diferente a la primera impresión ... Es un chico bastante común, con carácter, pero normal. — intentó explicar, sólo intentaba que Jaejoong se integrara con los demás como al comienzo de sus días en ese lugar. Pero sus amigos estaban completamente reacios a aquella posibilidad.

— ¿A quien llamas “normal”? ¿De qué nos sirve querer conocer a una persona así? ¿Por qué nos presentas? —

— Sí vas a tener ese tipo de amistades ... olvídate de la nuestra — finalizo el otro amigo con voz alta.

Yunho quedó estupefacto por aquel ultimátum en plena calle.
Pareció pensarlo durante unos segundos mientras miraba asombrado a sus amigos frente a él.

— Esta bien — dijo Yunho al fin. Dirigió una mirada a Jaejoong, quien aun aguardaba en silencio.
Y nuevo dirigió la mirada a ambos amigos, contestándoles con voz firme: — Podéis largaros—

Ambos amigos quedaron con bocas abiertas — Estás de broma ¿verdad? — preguntaron al unisonó — Realmente fue extraña y divertida tu broma, pero basta... ¿Enserio quieres ser amigo de este tipo? — le preguntó uno de ellos señalando con desprecio a Jaejoong, quien al fin pronunció algo en todo esto:

— Yunho, ¿Siempre tuviste amigos tan estúpidos? Creí que tus amigos serian tan amables como lo eres tú .. —

— Yo también lo creí ... — Yunho dio media vuelta, intentando seguir su camino sin añadir nada más a aquella discusión.



~~~~~~~


— Este es como el primer problema que tienes por hablar conmigo ... — le comentó el pelinegro mientras nuevamente caminaban juntos por las calles.

— Siento mucho que te hicieran pasar por eso — Yunho parecía preocupado por todas aquellas cosas inesperadas que sus amigos habían dicho a Jaejoong.

— ¿Despreciarme? ¿Insultarme? No me tome enserio sus palabras, fue como si las ratas tuviesen el don de hablar ... No les hice ningún caso en especial. Pero tuve unas tremendas ganas de dar una gran bofetada en sus caras ...— comenzó a reír, después detuvo su risa infantil y miró a Yunho con cierta seriedad: — Pero ... ¿Por qué me defendiste? ¿Por qué estas ahora a mi lado? — le preguntó

— Sentí que era lo que debía hacer. Dije que eras una persona amable, te has sincerado conmigo en tan poco tiempo .... No estaba bien, que tras todo lo que te han dicho, yo me marchara con ellos ... Traicionar tu confianza ... — Yunho parecía una persona leal.

Jaejoong no entendía por qué había decidido defender a alguien como él: — Son tus amigos ... —

— Parece que no tanto ... — suspiró.

Jaejoong declaró con sonrisa siniestra:— Eres un estúpido ... no sabes lo que has hecho ... —


- Continuara ... -


COMMENTS:
○ Gracias por tu comentario ○

Me gusto que Yunho defendiera a Jae de los sus supuestos amigo (creo que ellos hicieron eso pensando en el bien de Yunho, se preocuparon por el, eso pienso yo, ojala no me equivoque)
Pobre Jae es obvio que sufre por lo que esta viviendo, Yunho es una persona observadora y se dio cuenta de la mascara que monta haciéndose el que nada le afecta...
Me encanto este capitulo... saludos

 

Publicar un comentario




aboutcboxfanficsarchives


Welcome
Bienvenidos.

● Proyectos Activos ●

Comentarios / Dudas / Sugerencias
Podéis compartirlas en el Cbox

Agradezco los comentarios sobre los capítulos en las entradas y vuestras opiniones sobre los Fic's

En el Blog también encontrareis fanfic que recomiendo
Podéis recomendarme fanfic en el Cbox

Tienes algo encontrá del Yaoi
Tienes algo encontrá de TVXQ
Si es así por favor, cierra esta Web

● Último Serial Finalizado ●
[Un Momento de Huida]

La mayoría de los FanFic son de genero Lemon
Advierto en caso de que este genero hiera tu sensibilidad
Lemon: Situaciones sexuales

→ Haz CLICK aqui para seguir el Blog

◄ older posts newer posts ►